En su catequesis semanal, Francisco aseguró que el martirio no es un acto individual, sino una entrega por toda la Iglesia. Explicó que así como Cristo entregó su vida por la Iglesia, de la misma manera la Iglesia está llamada a entregar la vida por sus hermanos.
El papa aseguró que lo mártires actuales son más numerosos que en los primeros siglos. Recordó que algunos incluso llegan a perdonar a sus propios verdugos.
RESUMEN DE LA CATEQUESIS
Queridos hermanos y hermanas:
En esta catequesis reflexionamos sobre los mártires como testigos del Evangelio. La palabra martirio proviene del griego y significa dar testimonio. El primer mártir fue Esteban, que murió apedreado por confesar su fe en Cristo. Los mártires, por tanto, son hijos e hijas de la Iglesia —de diversas edades, lenguas y naciones— que han dado la vida por amor a Jesús.
Ese dinamismo espiritual que impulsaba a los mártires se va configurando en la celebración de la Eucaristía. Así como Cristo nos amó y se entregó por todos, quienes participan en la Misa sienten el deseo de responder gratuitamente a ese amor con la oblación de la propia vida.
Quisiera recordar que también hoy, en diversas partes del mundo, sigue habiendo numerosos mártires que, a imitación de Jesús y con su gracia, aun en medio de la violencia y la persecución, dan la mayor prueba de amor, ofreciendo su vida y llegando a perdonar a sus propios agresores.
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española. Por intercesión de los santos mártires, que proclamaron la fe hasta derramar su sangre, pidamos al Señor que no nos cansemos de ser sus testigos, sobre todo en los momentos de tribulación. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide.
Muchas gracias.
PA