Año 1971, Erwin Alfredo Bendfeldt Rosada es encarcelado por protestar en contra del gobierno de Guatemala. Su vida está a punto de terminar.
ERWIN ALFREDO BENDFELDT ROSADA
Escultor 'Copa Degli Ultimi'
“Me llevaron y 'PUM', me dispararon, mi hirieron acá en la 'testa', y yo me cubrí con la sangre de los muertos y no dije nada”
Su cuerpo es abandonado, junto con otros cadáveres, en una fosa común, hasta que se produce un milagro.
ERWIN ALFREDO BENDFELDT ROSADA
Escultor 'Copa Degli Ultimi'
“El cura me descubre, me porta a su iglesia, me proteje y después me lleva a la Embajada de México para protegerme con el embajador de México”
En 2017 llegó a Roma. Antes, estuvo por toda América, desde Argentina hasta Canadá. Vivió 23 años en la junlga. Más tarde vivió en España y Alemania, donde tiene raíces.
A los pocos días de llegar se quedó sin hogar y tuvo que dormir durante semanas en el Parque de los Acueductos que ahora traslada al lienzo recordando esa época.
Su último trabajo es la 'Copa de los Últimos', un trofeo que recibió el último atleta de la Maratón de Roma. Organizado por Athletica Vaticana, en referencia a la famosa frase de la Biblia: “Los últimos serán los primeros”.
ERWIN ALFREDO BENDFELDT ROSADA
Escultor 'Copa Degli Ultimi'
“Hice un corredor, con las piernas con prótesis y corriendo y saludando a Dios, al Padre”.
En honor a Francisco, utilizó los materiales más humildes. Tuvo la oportunidad de ser recibido por el Santo Padre. Alfredo sonríe al recordar la reacción del papa al ver el trofeo.
“Santo Padre, gracias. Es la segunda vez que le doy un regalo”.
“¡Muchas gracias!”
ERWIN ALFREDO BENDFELDT ROSADA
Escultor 'Copa Degli Ultimi'
¡Me dijo esa es la copa! Qué cosa más linda. Él la tocó. ¡Es oro de 24 quilates le dije yo!
Alfredo tiembla al agarrar el pincel, pero no es de miedo. Vivencias complicadas, lesiones y operaciones al límite no le espantan. Su vida, mezclada con su fe, es inspiración.
ERWIN ALFREDO BENDFELDT ROSADA
Escultor 'Copa Degli Ultimi'
“Estoy vivo porque Dios quiere que esté. Y mientras esté aquí, voy a seguir pintando, voy a seguir esculpiendo, voy a seguir expresándome para dejar algo para la humanidad”
Ahora que el papa le alaba y reconoce su trabajo, recoge lo sembrado durante su vida. Por eso, espontaneamente, entona su canción favorita, casi autobiógráfica.
DA