La oración ecuménica por la paz en Sudán del Sur comenzó con esta canción. Tuvo lugar en el Mausoleo John Garang, donde está enterrado quien fue líder del Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán del Sur de 1983 a 2005.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, dio este discurso por la paz
Ser cristianos nos coloca a todos en una fraternidad de creyentes. No importa que seamos de países diferentes, diferentes denominaciones, diferentes tribus. Mi querido hermano, el Papa Francisco, el moderador Iain y yo estamos aquí como vuestra familia.
El primado de la Iglesia anglicana también habló del respeto a las mujeres sursudanesas y elogió como proveen a sus familias a pesar de las dificultades.
Por su parte, el moderador presbiteriano escocés, Iain Greenshields, dijo que las diferentes Iglesias y sus miembros deben estar unidas como ya hicieron antes en la historia del país.
En este país hay un gran legado de Iglesias trabajando juntas por la paz y la reconciliación. Jugaron un papel clave en que el país consiguiera la paz pacíficamente.
En su discurso por la paz, Francisco recordó un pasaje del Éxodo en el que, cuando Moisés abandona Egipto con los israelitas, les persiguen perros y carros tirados por caballos, pero no tenían miedo porque Dios les había prometido la libertad. Dijo que para, los sursudaneses, esa tierra prometida era la paz.
El Papa explicó que para Dios, la paz no es solo la ausencia de conflictos sino una comunión fraterna. Insistió en perdonarse los unos a los otros para desescalar la guerra y caminar juntos recordando los pasos de sus predecesores por la convivencia. También les pidió elegir la paz por encima de todo.
FRANCISCO
Quien sigue a Cristo elige la paz siempre. Quien desencadena guerras y violencia traiciona al Señor y reniega de su Evangelio.
“Amaos los unos a los otros como yo os he amado”, este es el mandamiento de Jesús que contradice cualquier visión tribal de la religión.
Al finalizar el encuentro de oración, el Papa se despidió de Welby y Greenshields y se marchó en silla de ruedas acompañado por el mismo coro que le recibió.
RM
