Francisco se reunió con los estudiantes del Pontificio Colegio Norteamericano. Forman en Roma a los seminaristas de Estados Unidos.
Los jóvenes que han venido aquí de diferentes lugares de América, mirando la colina Vaticana, refuerzan su fe y su amor por el pontífice romano.
El Papa les dijo que los tres elementos más importantes para la formación de un sacerdote son el diálogo, la comunión y la misión. Les invitó a cuidar el diálogo hablando a diario con Jesús a través de la oración, la meditación de la Palabra de Dios, el acompañamiento espiritual y el silencio ante el Sagrario.
Para vivir en comunión les pidió estar atentos a las diferentes formas de vivir la fe que pueden encontrar en una ciudad llena de vocaciones como Roma.
Durante vuestros años en Roma os invito a tener los ojos abiertos ante el misterio de la unidad de la Iglesia, que se manifiesta en la legítima diversidad, pero se vive en la unidad de la fe.
Y para encontrar su misión, Francisco les pidió que no pierdan de vista las muchas obras de caridad que se pueden ver en Roma.
Confío en que, mientras florecen las obras de misericordia espiritual y corporal a través de los diversos apostolados educativos y caritativos en los que estáis ocupados, seáis siempre muestra de una Iglesia que sale y anda en encuentro.
El Pontificio Colegio Norteamericano fue fundado el 8 de diciembre de 1859.
RM