Durante la catequesis sobre el discernimiento el Papa explicó lo importante que es dedicar tiempo a las Sagradas Escrituras porque dan claves sobre cómo vivir el día a día.
Puso el ejemplo de cómo una vez, mientras confesaba durante la noche, se le acercó un joven de aspecto duro, lleno de tatuajes, que le contó lo mucho que le había ayudado seguir un consejo de su madre ante un problema “grave” que debía afrontar.
FRANCISCO
Yo recuerdo, una vez, en un peregrinaje de jóvenes... que se hace una vez al año al santuario de Luján, a 70 kilómetros de Buenos Aires. Llegar hasta allí lleva todo el día y yo tenía la costumbre de confesar durante la noche. Se acercó un chico. 22 años todo... con muchas cosas ahí, tatuajes. Dios mío – pensé – ¿Qué me viene a hacer este no? Y me dijo: Mire usted. Yo vine porque tengo un problema grave y se lo conté a mi madre y ella me dijo: vete a ver a la Virgen, haz la peregrinación y la Virgen te dirá qué tienes que hacer. Y vine, tuve contacto con la Biblia aquí, escuché la Palabra de Dios y me tocó el corazón. Y debo hacer esto, esto, lo otro y lo otro... La Palabra de Dios te toca el corazón y te cambia la vida y así lo he visto muchas veces esto, muchas veces.
JRB
