Este que ven es el Pontificio Colegio Pío Latinoamericano. En él viven 52 sacerdotes de 15 países mientras profundizan sus estudios en las Universidades Pontificias de Roma.
A lo largo de su historia han pasado 4.274 exalumnos por el colegio. De ellos, 474 terminaron siendo obispos y 37 cardenales. También pasaron por aquí santos como Óscar Romero o beatos como el venezolano José Gregorio.
P. GILBERTO FREIRE, S.J.
Rector Pontificio Colegio Pío Latinoamericano
De Óscar Arnulfo Romero se dice que él, cuando estaba de estudiante acá, para ayudar a los pobres, se tomaba un poco de alimentos del colegio y secretamente los llevaba a distribuir a los pobres, ¿verdad? En cuanto a José Gregorio, podemos decir que él lamentablemente no logró su sueño porque él quería ser sacerdote. Y para eso vino acá. Y tuvo varios intentos, pero lamentablemente su salud no le favoreció y tuvo que regresar.
Durante sus 164 años en Roma, el Pontificio Colegio Pío Latinoamericano ha cambiado varias veces de ubicación. Esta es la sexta sede que tienen. En su capilla conservan el altar preconciliar en el que Óscar Romero celebró su primera Eucaristía.
Pero quizá la mayor joya del colegio es este mosaico de la Virgen de Guadalupe, aún más detallado que el de los Jardines Vaticanos.
P. GILBERTO FREIRE, S.J.
Rector Pontificio Colegio Pío Latinoamericano
La diferencia primera es que el mosaico del Vaticano está hecho para exteriores y, en cambio, este está hecho para el interior. Y, por lo tanto, aquí se puede apreciar mucho más cada uno de los detalles de la elaboración.
A lo largo de su historia, el Pontificio Colegio Pío Latinoamericano ha recibido tantos alumnos que, los que provenían de un mismo país y eran más numerosos, acabaron creando otras tres instituciones: el Colegio Pío Brasileño, el mexicano y el filipino.
Ahora siguen profundizando en la formación de sacerdotes latinoamericano para que pongan sus virtudes al servicio de la comunidad.
Rodrigo Moreno Quicios