El Papa Francisco ha emitido un decreto que promulga una nueva constitución para la Orden de Malta y la disolución de su actual dirección.
Francisco también ha convocado un capítulo general extraordinario el 25 de enero para iniciar el proceso de elección de un nuevo Gran Maestre.
Esta orden soberana, con más de 900 años, cuenta con unos 13.500 miembros y 95.000 voluntarios en todo el mundo. Gestionan campos de refugiados y clínicas. También organizan proyectos de ayuda en caso de catástrofe.
La Orden de Malta estaba inmersa en un proceso de reforma de su constitución desde 2017. El delegado especial del Papa para la Orden, el cardenal Silvano Tomasi, ha asegurado que la nueva constitución no debilita su soberanía internacional.
Según la nueva constitución, los altos cargos de la orden, incluido su Gran Maestre, ya no tendrán que descender de un linaje noble.
Además, el Gran Maestre ya no seguirá la tradición de ser elegido de por vida. Será por un mandato de 10 años renovables y estará obligado a dimitir a los 85 años.
JM
TR: AM