Durante la catequesis pública semanal el papa ha hablado sobre la cultura del descarte, de los ancianos abandonados incluso por sus familias, de una condición en la que hay fragilidad y vulnerabilidad.
El Pontífice ha tomado como referencia el Salmo 71, 'No me abandones cuando se agoten mis fuerzas'.
RESUMEN DE LA CATEQUESIS DEL PAPA EN ESPAÑOL
Queridos hermanos y hermanas:
En esta catequesis consideramos, con el salmista la fragilidad y la vulnerabilidad presentes en la vida de los ancianos.
Esta realidad, ya dura en sí misma, da origen en nuestra civilización a situaciones de abandono, de engaños y se abusos contra las personas mayores. Es paradójico que nuestra sociedad, tan avanzada en su presunta eficacia, propicie al mismo tiempo estas injusticias, cada vez más numerosas, que lejos de ser una excepción, muestran palpablemente la cultura del descarte que se ha apoderado de ella.
Ante esto, el salmista reafirma su confianza en el Señor, que es para él “la roca de refugio” (Sal 71, 3). Pues, de hecho, cuando nuestras fuerzas se terminan, el Señor nos colma de seguridad y fortaleza. Toda la sociedad debe sentirse interpelada por su incapacidad de convivir con la vejez, incapacidad que en ocasiones llega a hacer que los ancianos sean despojados de su dignidad y no se acepte la vulnerabilidad y fragilidad propias de esa etapa de la vida.
Estamos llamados a acoger el magisterio de la fragilidad, que la vejez pone antes nuestros ojos de manea creíble en todo el arco de la vida humana, pues todos tenemos necesidad de confiar en Dios e invocar su ayuda. El magisterio de la fragilidad es necesario para realizar una reforma indispensable en nuestra civilización, pues la marginación de los ancianos afecta todas las etapas de la vida.
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española. Hagamos nuestra la súplica del anciano enfermo del salmo, la cual nos recuerda que en la oración y confianza en el Señor encontramos nuestra fuerza y refugio en los momentos difíciles de la vida. Dios los bendiga. Muchas gracias.
RG
