Los tambores resonaron en las paredes del Aula Pablo VI marcando el paso de los nuevos reclutas de la Guardia Suiza.
La ceremonia de jura de bandera de los 26 nuevos reclutas no se realizó en el Patio de San Dámaso sino a cubierto ante la amenaza de lluvia.
Esta es una de las ceremonias más pintorescas y solemnes que se pueden ver en el Vaticano.
Fórmula del juramento (leído por el capellán):
“Juro servir fielmente, lealmente y con honradez al pontífice reinante y a sus legítimos sucesores, de dedicarme a ellos con todas mis fuerzas, sacrificando, si es necesario, también mi vida en su defensa”
“Asumo los mismos deberes con respecto al colegio cardenalicio durante el período de Sede Vacante. Prometo también al comandande y a los otros superiores respeto, fidelidad y obediencia.
Así pues, juro. Que Dios y nuestros Santo Patrones me asistan”.
Respuesta del guardia suizo:
“Yo, alabardero (nombre) juro que observaré fielmente, lealmente y con honradez todo lo que en este momento ha sido leído. Que Dios y nuestros santos patrones me ayuden”.
JRB