El Papa Francisco se reunió en el Vaticano con el presidente de Eslovenia, Borut Pahor.
Cada vez que veo a un esloveno, pienso en Argentina.
El presidente no perdió tiempo, e invitó al Papa a su país.
En primer lugar, Santidad, espero de todo corazón que venga a Eslovenia este año.
Acompañó la invitación con varios regalos, como la potička, el pan dulce esloveno. También una colección de paneles de colmenas pintados, en recuerdo de la fuerte tradición de apicultura en este país, y un libro sobre la relación entre las abejas y los seres humanos.
El Papa le regaló su Mensaje por la paz de este año, y otros grandes documentos de su pontificado.
También, un pequeño mosaico realizado por jóvenes en el Vaticano.
Es como una oda al trabajo. El trabajo como dignidad.
Precioso. ¿Me permite?
Fue un encuentro cordial que sirvió para conmemorar los 30 años de relaciones diplomáticas entre Eslovenia y la Santa Sede.
Que el Señor le bendiga.
Es un privilegio, como siempre. Rezamos por usted.
Gracias.
Después de reunirse con el Papa, también se encontró con el Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, para abordar cuestiones más políticas.
CT/JMB
