El sacerdote polaco Jan Macha fue asesinado por los nazis por ayudar a familias de arrestados o de combatientes en la II Guerra Mundial.
El Papa aprobó su beatificación en 2019, pero la pandemia obligó a retrasar la ceremonia hasta este 20 de noviembre.
Jan Macha nació en 1914. Se ordenó sacerdote justo antes del comienzo de la Segunda Guerra Mundial, en 1939. Formó un grupo clandestino de miles de voluntarios llamado “Lirio de los valles” para ayudar a familias perseguidas por el ejército de ocupación nazi.
P. TOMASZ WOJTAL
Archidiócesis de Katowice (Polonia)
“Recogía el dinero que luego compartía con estas familias. Les llevaba también comida y productos necesarios para la vida cotidiana. Se encontraba con ellos, les consolaba”.
En 1941 lo arrestaron y en prisión fue torturado. Lo condenaron a pena de muerte y lo decapitaron en 1942. Su cuerpo nunca se recuperó.
P. TOMASZ WOJTAL
Archidiócesis de Katowice (Polonia)
“Pidió construir una tumba simbólica que lo recordara en el futuro cuando la gente fuera al cementerio de su ciudad y pudiera rezar un padre nuestro por él”.
Tan solo tenía 28 años cuando le condenaron a morir guillotinado. Salvó a miles de personas y será el primer beato del territorio de su diócesis, en Polonia.
BSB