San José es uno de los personajes que más desapercibidos pasa en la Biblia. Y sin embargo, su papel como padre de Jesucristo es crucial. Mientras acompañaba a un familiar enfermo, Teresa Gutiérrez de Cabiedes quiso rezarle a este patrono de la Iglesia, pero no supo cómo. Por eso escribió este libro. Se titula “San José, ¿rezamos juntos?” y enseña a rezar el rosario junto a él.
TERESA GUTIÉRREZ DE CABIEDES
Autora, “San José, ¿rezamos juntos?”
“San José no era una marioneta que puso Dios para disimular que Jesús necesitaba un padre, sino que fue un padre real. Un padre que influyó en la vida espiritual y en la vida humana de su hijo”.
Teresa Gutiérrez de Cabiedes comienza su libro mirando a San José en los Misterios Gozosos, es decir, la parte del rosario centrada en la infancia y vida privada de Jesús. Ahí es fácil contemplar al santo porque aparece en varias escenas recogidas en los Evangelios.
Las dificultades llegaron cuando Teresa tuvo que meditar sobre los Misterios Dolorosos, centrados en la Pasión de Cristo. En sus correspondientes pasajes del Evangelio, no se nombra a San José. Sin embargo, ella seguía viendo su influencia.
TERESA GUTIÉRREZ DE CABIEDES
Autora, “San José, ¿rezamos juntos?”
“San José le había ensañado a Jesús a trabajar la madera y todo el Via Crucis es Jesús arrastrando un leño, que realmente para él era la materia más cercana. Entonces ver que todo eso se está aplicando como castigo a su hijo, cuando había sido la bendición con la que había aprendido a vivir y a trabajar... Me impresionó, me impresionaba mucho”.
La autora también se encontró con un muro cuando quiso escribir las Letanías, una ristra de piropos que el rosario dedica a la Virgen. Pensaba que San José no tenía, pero justamente el Papa Francisco había añadido en esas semanas cuatro más a una larga lista con siglos de historia.
TERESA GUTIÉRREZ DE CABIEDES
Autora, “San José, ¿rezamos juntos?”
“Me encuentro y descubro que hay unas letanías a San José. Digo: 'Bueno, ahora vamos a hacer el cambio'. Con la Virgen y con Jesús, voy a contemplar a este desconocido, a este que siempre pasó desapercibido, que siempre ha vivido con mucha humildad... Incluso dentro de la vida de la Iglesia. Pero que, ¡fíjate! Que tiene sus propias letanías, que las han rezado los cristianos durante siglos y que yo ni siquiera sabía que existían”.
San José es también un santo de mucha devoción para el Papa Francisco, quien decidió dedicarle un año especial desde el 8 de diciembre de 2020 hasta la misma fecha del 2021.
FRANCISCO
“Dios le confió sus tesoros más preciosos: Jesús y María. Y él correspondió plenamente con fe, con coraje, con ternura, con corazón de Padre”.
En mayo de este año, Teresa Gutiérrez de Cabiedes enseñó su libro al Papa acompañada de su madre. Nunca olvidará la ternura con la que el Papa Francisco recibió el primer ejemplar.
RM
