Carissa y Patrick Douglas, de Ontario, Canadá, están orgullosos de ser padres de 14 hijos. No le tienen ningún miedo al desafío que eso supone. De hecho, Patrick tuvo muy claro que eso era lo que deseaba. Todo comenzó cuando tenía solo 12 años y estaba de viaje en Irlanda.
CARISSA Y PATRICK DOUGLAS
'Estábamos visitando a los primos de mi padre y visitamos a una familia con 14 niños. Me dejó boquiabierto. Me divertí mucho con ellos en los columpios y me inspiró la forma en que los mayores ayudaban a los más pequeños. Simplemente jugamos con ellos, pero nos absorbieron. Fue una experiencia tan intensa que se me quedó grabado para siempre'.
Los Douglas dicen que la educación cristiana de sus hijos ocupa un lugar fundamental. Carissa hasta decidió escribir e ilustrar una serie de libros católicos infantiles, la “Little Douglings”, donde ayuda a los niños a fortalecer su relación con Dios.
CARISSA Y PATRICK DOUGLAS
“Quería crear algo que ayudara a mis hijos a cultivar su propia relación con Cristo. Como padres, nos esforzamos mucho en tratar de inculcarles valores, y tratamos de ser ejemplos para ellos, y tratamos de enseñarles los caminos de la fe y las enseñanzas, pero al final todo se reduce a su propia relación personal con Cristo. Por eso quería hacer algo que les ayudara a desarrollar esa amistad”.
Los Douglas explican que ha sido clave la ayuda de sus propios hijos para sacar adelante la familia. Rezaron mucho para que fuera así. El ser tantos ayudó a forjar un fuerte sentido de comunidad en toda la familia.
CARISSA Y PATRICK DOUGLAS
'La cultura actual está tan centrada en el individualismo que cada vez se ofrecen menos espacios de comunidad para los jóvenes. La familia es la comunidad más natural, llena de hermanas y hermanos, y sabemos que gracias a nuestros hijos, esta comunidad permanecerá unida durante mucho tiempo'.
Una familia con 14 hijos puede no parecer real pero lo es, y, sobre todo no es un drama: Carissa y Patrick demuestran que es posible.
JM
JRB