El boletín médico del martes es muy favorable.
Se dice que el Papa descansó bien durante la noche y que, por la mañana, después de desayunar, leyó la prensa e incluso se levantó para caminar.
Se concluye señalando que la evolución de Francisco es buena y que así lo confirman los exámenes posoperatorios que se están realizando.
Según Il Corriere della Sera, la operación fue más complicada de lo previsto y por eso duró tres horas. Se comenzó con una técnica poco invasiva, pero después los médicos decidieron proceder con el modo más directo.
La operación del domingo fue llevada a cabo con gran discreción y sin alarmismos. Permanecerá en el hospital hasta el domingo o el lunes, lo que hará que probablemente rece el Ángelus del domingo asomándose a la ventana de su apartamento en el Gemelli.
Si no hay novedades relevantes, el próximo parte médico se publicará dentro de 24 horas.
Javier Romero
VM