Los nuevos reclutas de la Guardia Suiza son 34. Todos ellos juran lealtad al Papa Francisco y sus sucesores.
Tradicionalmente la ceremonia de juramento es el 6 de mayo, en recuerdo de los 147 soldados suizos que murieron defendiendo al Papa Clemente VII durante el saqueo de Roma.
Francisco se reunió con los nuevos reclutas y con sus familias para darles las gracias por su dedicación y profesionalidad. Dijo que son reflejo de la Iglesia que acoge.
FRANCISCO
Los peregrinos y turistas que vienen a Roma tienen la posibilidad de experimentar la cortesía y la disponibilidad de los guardias que están en las entradas de la Ciudad del Vaticano. No olvidéis nunca estas cualidades que constituyen un hermoso testimonio y son el reflejo de la Iglesia acogedora.
Los nuevos alabarderos, vestidos con sus ropajes característicos de color amarillo, rojo y azul, estaban emocionados.
TOBIAS ZURFLUH
Guardia suizo
“Es algo especial, no todos los que quieren este trabajo pueden hacerlo. Vives cosas que la mayor parte de la gente no puede vivir, y es algo que valoro mucho”.
GIAN ANDREA BOSSI
“Estoy muy contento. Es un orgullo y un gran honor poder prestar el juramento.
Protegemos al Papa, ese es nuestro deber inmediato y servimos a la Iglesia católica y servimos a Dios”.
Sus familiares les acompañaron en este día. Se podía palpar la emoción de todos en un momento tan especial para su hijo.
ALEXANDRA BOSSI
Madre de guardia suizo
“Es increíble. No hay palabras que describan este sentimiento. Tienes que vivirlo”.
BORIS BOSSI
Padre de guardia suizo
“Es bonito tener a un hijo cerca del Papa, un enlace directo”.
La Guardia Suiza es un cuerpo militar creado en el año 1506, cuando Julio II pidió protección a los nobles de Suiza. Más de 500 años después, siguen activos. Para entrar en este ejército, los reclutas deben medir más de 1,74 metros, tener entre 19 y 30 años, tener los estudios de primaria y secundaria y, por supuesto, ser ciudadanos suizos.
CT/JRB