El Papa ha celebrado los oficios de este Jueves Santo en privado, y en casa de Angelo Becciu, a quien en septiembre obligó a renunciar a sus derechos cardenalicios.
Fuentes cercanas al Papa lo han interpretado como un 'gesto de paternidad' hacia el cardenal, característico del Jueves Santo.
No se recuerda otra circunstancia en la que un Papa haya celebrado la misa 'in Coena Domini' del Jueves Santo en privado.
El Vaticano no ha distribuido imágenes del encuentro.