Han pasado ocho años desde que Benedicto XVI presentó su renuncia como pontífice. Su secretario y prefecto de la Casa Pontificia ha asegurado a Rome Reports que se encuentra muy lúcido.
MONS. GEORG GÄNSWEIN
Prefecto de la Casa Pontificia
“Su condición física es muy débil, su voz se hace cada vez más débil. Esto es cierto. Pero la fuerza de sus ojos, la intensidad y la vivacidad de su mirada y de su mente, del cerebro, ¡es increíble! Las fuerzas que han ido disminuyendo han hecho que crezcan otras, al menos esa es mi impresión”.
A sus 93 años, Benedicto XVI se ha convertido en el Papa más anciano de la historia de la Iglesia.
MONS. GEORG GÄNSWEIN
Prefecto de la Casa Pontificia
“No podemos olvidar lo que él mismo dice: ‘Tengo casi 94 años. ¿Qué queréis que haga? No esperaba llegar a ser tan anciano. Y ha llegado a decirme que ‘No esperaba que la distancia, el camino desde el último día de pontificado hasta la puerta de San Pedro (en el Cielo) fuese tan largo’”.
Aún así, el pontífice emérito vive con normalidad cada jornada en el Monasterio Mater Ecclesiae, dentro de los muros del Vaticano
MONS. GEORG GÄNSWEIN
Prefecto de la Casa Pontificia
“Almuerza siempre con nosotros, come lo que comemos los demás, aunque menos cantidad. Yo le digo: ‘Santo Padre, come menos que un ratón de iglesia’. Y me contesta: ‘Sí, no tengo apetito. Como, pero no tengo hambre’. Se levanta por la mañana, viene a Misa. Concelebra, porque no se puede mantener en pié. Pero está a mi lado, en la silla de ruedas junto al altar y concelebramos”.
Monseñor Ganswein acaba de publicar un libro de comentarios al Vía Crucis. Una obra con la que Benedicto XVI está familiarizado.
MONS. GEORG GÄNSWEIN
Prefecto de la Casa Pontificia
“Joseph Ratzinger escribió en el año 2005 un Via Crucis, a petición de San Juan Pablo II. También ahora en el monasterio, el Vía Crucis forma parte de nuestra piedad popular durante la Cuaresma. Los viernes como muchos cristianos rezamos el Vía Crucis”.
La obra de Gänswein sobre los últimos momentos de Jesús se ha presentado en alemán e italiano. En este momento se preparan las traducciones al inglés y español.
Antonio Olivié