En una breve conversación presentada como entrevista por el periódico italiano, el “Corriere della Sera”, Benedicto XVI desaprueba a quienes intentan utilizarle contra Francisco y recuerda que el Papa es sólo uno y que no es Joseph Ratzinger.
También vuelve a zanjar la cuestión de su renuncia. Dice que fue libre y meditada y que no fue consecuencia de ninguna conspiración.
Concretamente señala lo siguiente:
“Algunos amigos míos un poco fanáticos siguen enfadados y no quieren aceptar mi decisión. Me refiero a las teorías conspiratorias.
No quieren creer que fue una decisión tomada reflexivamente. Pero mi conciencia está tranquila”.
Benedicto se muestra preocupado por el viaje de Francisco a Irak, por la inestabilidad del país y la pandemia. Sin embargo dice que lo acompañará toda su oración.
El periodista señala que Benedicto XVI está débil y delgado, que habla muy despacio y que está lúcido.
Igual que el pasado 28 de noviembre, durante la visita del Papa con los nuevos purpurados.
Javier Romero
