En Roma, puedes encontrar una heladería en casi todos los rincones de la ciudad. Sin embargo, destaca esta 'gelateria' en un barrio cerca del Vaticano.
SEBASTIÁN PADRÓN
Padrón Gelateria Artigianale
“Son diferentes porque yo hago un helado muy tradicional, sin ningún tipo de aditivos, como se hacia muchísimos años atrás”.
Este es Sebastián Padrón, un argentino de La Plata que abrió la 'Padrón Gelateria Artigianale' cerca de la Plaza de San Pedro. Ofrece sabores tradicionales argentinos, hechos con métodos artesanales, e incluso pasteles y productos argentinos.
SEBASTIÁN PADRÓN
Padrón Gelateria Artigianale
“Tenemos muchos clientes argentinos muchos clientes latinoamericanos, y bueno, hasta un cliente muy especial”.
Se refiere a su cliente favorito y el más reconocido, el Papa Francisco.
Desde su inauguración, Sebastián ha atendido a varios trabajadores del Vaticano que finalmente convencieron al Papa para que probara sus productos. Al final, Francisco estuvo tan complacido que le envió una carta personal de agradecimiento, un medallón y esta bendición, como símbolo de aprecio.
Dice que el sabor de helado favorito del Papa es sin duda el predilecto de los argentinos: Dulce de Leche. Un ingrediente que importa con orgullo desde su país natal.
La semana pasada, Sebastián y su familia recibieron una sorpresa.
SEBASTIÁN PADRÓN
Padrón Gelateria Artigianale
“La semana pasada recibimos una sorpresa: Una llamada telefónica para agradecernos, la atención que tenemos con él, del helado y las empanadas que le llevamos como regalo para que las pruebe. Y ahí nos dijo si lo queríamos visitar y lo visitamos”.
Sebastián y su familia fueron invitados a conocer al Papa en Casa Santa Marta. Allí hablaron e intercambiaron regalos. Sebastián dice que la atención que les dio, especialmente a sus hijos, fue muy conmovedora.
SEBASTIÁN PADRÓN
Padrón Gelateria Artigianale
“Una persona muy simple, muy sencilla, muy amable. Y la cosa que también nos emocionó fue cuando él, en un momento hizo un gesto con la cabeza diciendo que estar en ese momento hablando con nosotros era como sentirse vecino, como sentirse en casa, digamos”.
El trabajo duro y la perseverancia de Sebastián a lo largo de los años le han producido, sin duda, muchas recompensas. Dice que la más importante ha sido poder atender y conocer al Papa argentino, ese vecino que ve como un abuelito, al que lo hace sentir como en casa.
Christian Campos
Traducción: Daniel Díaz Vizzi