El Papa ha sido informado del atentado en Niza en el que tres personas han sido brutalmente asesinadas en una iglesia.
El portavoz del Vaticano ha dicho que nunca puede aceptarse el terrorismo y la violencia y ha explicado que Francisco acompaña “a la comunidad católica en luto”.
Además, dice, está rezando “por las víctimas y sus seres queridos, para que cese la violencia, para que volvamos a considerarnos como hermanos y no como enemigos, para que el querido pueblo francés reaccione unido al mal con el bien”.
También, la conferencia episcopal de Francia ha dicho que es “urgente recuperar la indispensable fraternidad que nos mantendrá a todos en pie ante estas amenazas”.
El obispo de Niza ha ordenado el cierre de iglesias en la ciudad. Ya están bajo protección policial.
Además, ha pedido “que el espíritu de perdón de Cristo prevalezca ante estos actos de barbarie”.