En las principales ciudades de Italia los jóvenes salieron a la calle y desafiaron el coronavirus para denunciar el racismo y recordar a George Floyd.
En Roma unas 2.000 personas se presentaron en Piazza del Popolo. Todos llevaban pancartas como estas. Algunos eran americanos que viven parte del año en Italia.
“Soy americana y estoy aquí porque muchos de nosotros estamos frustrados y heridos. Tengo miedo por lo que pueda pasarle a mi hijo, que es un adolescente de color en América”.
Muchos otros eran estudiantes italianos.
“En vez de quedarme en casa decidí salir para mostrar mi apoyo”.
El momento culminante fue cuando todos se arrodillaron durante 8 minutos 46 segundos, el tiempo que tardó el policía en asfixiar a Floyd.
Italia salió a la calle y también a las iglesias. En Santa María in Trastevere la Comunidad de San Egidio organizó una vigilia de oración por la Coexistencia pacífica en EE.UU. presidida por el cardenal Kevin Farrell.
CARD. KEVIN J. FARRELL
Prefecto dicasterio Laicos, Familia y Vida
“Y si la paz de Cristo está verdaderamente presente en el corazón de los creyentes no puede haber espacio para la rivalidad”.
La Comunidad de San Egidio, especialmente involucrada en procesos de pacificación en todo el mundo, dijo que es el momento de hacer memoria. Pidieron recordar y seguir el ejemplo de otros que lucharon por igualdad de derechos.
MARCO IMPAGLIAZZO
Presidente de la Comunidad de San Egidio
“Nosotros creemos en el legado, el trabajo y el gran testimonio de Martin Luther King y de muchos otros que en América han trabajado por los plenos derechos y la superación de cualquier forma de racismo y discriminación”.
La muerte de George Floyd no ha pasado desapercibida en países donde la pandemia golpeó con especial dureza. Italia, de hecho, ha querido así denunciar el racismo.
Javier Romero