En las últimas semanas, el Papa ha citado varias veces el libro “Los novios”, de Alessandro Manzoni. Es sin duda una de sus novelas preferidas y al principio de su pontificado aseguró que la había leído al menos tres veces y se sabe de memoria el principio.
Citó a uno de sus protagonistas en la homilía de la Viglia Pascual.
FRANCISCO
“Si en el camino eres débil y frágil, si caes, no temas, Dios te tiende la mano y te dice: «Ánimo”. Pero tú podrías decir, como don Abundio: «El valor no se lo puede otorgar uno mismo»”.
Pero “Los Novios” no es el único clásico amado por el Papa. De la literatura italiana conoce bien “La Divina Comedia” de Dante Alighieri.
Tiene un gusto muy variado. Es apasionado de la poesía del alemán Friedrich Hölderlin y la del jesuita inglés Gerard Manley Hopkins, que perteneció al Movimiento de Oxford.
Confesó a Vladimir Putin que lee con gusto las obras de Tolstoi y de Dostoyevski. De hecho, citó “Los hermanos Karamazov” durante su viaje a Abu Dhabi y elogió la humanidad de sus personajes en la reciente entrevista con Austen Ivereigh.
Cuando era un joven profesor de Literatura, Bergoglio invitó a Jorge Luis Borges a dar un curso de Escritura Creativa a sus alumnos.
En aquellos años, aconsejaba a esos chicos el libro “Tarde he llegado a amarte” de Ethel Mannin.
Y en cuanto a consejos, también propuso a los periodistas durante una de sus ruedas de prensa la novela apocalíptica “Señor del mundo”, del inglés Robert Hugh Benson.
JMB
