A causa de la pandemia, las celebraciones del Jueves y Viernes Santo y Pascua serán dentro de la basílica de San Pedro. El Papa presidirá las ceremonias a puerta cerrada, sin peregrinos.
El Jueves Santo no se hará la Misa Crismal que normalmente se celebra por la mañana. Se ha aplazado hasta que termine la pandemia.
Por la tarde sí que se celebrará la ceremonia del Jueves Santo. Será a las 6 de la tarde hora local. Normalmente Francisco celebraba esta Misa en una cárcel pero este año no es posible. Tampoco se podrá realizar el tradicional rito del lavado de pies.
El Viernes Santo se repetirá el mismo esquema: el Papa venerará la Cruz, postrándose ante ella, en la basílica durante la ceremonia que empieza también a las 6 de la tarde.
El Via Crucis será a las 9 de la noche hora local. Esta es quizás la ceremonia más simbólica por hacerse en el Coliseo. Sin embargo tampoco tendrá lugar ahí sino en la plaza de San Pedro.
Este año las meditaciones de cada estación han sido preparadas por 14 personas relacionadas con el mundo de la delincuencia: desde víctimas, la madre de un delincuente, un policía penitenciario y un sacerdote acusado injustamente y liberado tras 8 años de prisión. Cinco prisioneros vienen de “Due Palazzi”, la cárcel de Padua, en Italia. Las meditaciones fueron recopiladas por el capellán Marco Pozza y la voluntaria Tatiana Mario.
La Vigilia Pascual será el sábado a las 9 de la noche hora de Roma y este año no incluirá ni la procesión con las velas ni el bautismo de adultos. El Papa, de nuevo, presidirá la liturgia con un pequeño grupo de colaboradores.
La Misa del Domingo de Resurrección será a las 11 de la mañana y será sin peregrinos. Al final Francisco recitará el Regina Coeli e impartirá la bendición Urbi et Orbi.
Todos los eventos se podrán seguir por Rome Reports streaming.
