El Papa se reunió con los participantes del congreso “La riqueza de los años” que analiza los desafíos y la atención pastoral a personas de la tercera edad. Francisco les recordó que la riqueza de los años “es un tesoro precioso que toma forma en el camino de la vida”.
Dijo que el giro en la pirámide demográfica de muchos países debe llamar a “la reflexión para aprender a captar y apreciar el valor de la vejez”.
FRANCISCO
Mientras que, por un lado, los Estados deben hacer frente a la nueva situación demográfica en el plano económico, por otro, la sociedad civil necesita valores y significados para la tercera y la cuarta edad.
El Papa les recordó que “la vida es un regalo, y cuando es larga es un privilegio, para uno mismo y para los demás”.
FRANCISCO
Hoy quiero decirles que los ancianos son también el presente y el mañana de la Iglesia. Sí, también son el futuro de una Iglesia que, junto con los jóvenes, profetiza y sueña.
Por eso les pidió que no se dejen desanimar y resaltó que es muy importante que los ancianos y los jóvenes hablen entre ellos.
Daniel Díaz Vizzi