La Navidad es una época especial en el Vaticano. Pero también muy intensa. Aquí ya todo esta listo para celebrar el Nacimiento de Jesús.
Como es tradicional, el Papa presidirá las ceremonias religiosas más importantes.
En Nochebuena, a las 9:30 de la noche, celebrará una Misa en la basílica de San Pedro. Comenzará con el antiguo canto de la “Calenda”. Al final de la ceremonia, llevará personalmente hasta el pesebre la figura del Niño Jesús.
La mañana del 25, justo a mediodía, tendrá su discurso de Navidad desde el balcón de la basílica e impartirá la bendición “Urbi et Orbi”. Ésta sólo se realiza en Navidad, en Pascua y el día de su elección.
En la víspera de Año Nuevo, a las 5 de la tarde, rezará en San Pedro el “Te Deum”, la oración que usa la Iglesia para dar gracias a Dios. Un modo simbólico de concluir el año. Habitualmente, antes de regresar a su casa, el Papa se acerca al pesebre que hay en la plaza para verlo de cerca y escuchar villancicos.
El 1 de enero a las 10 de la mañana celebra la primera Misa de año y reza por la paz en el mundo. Luego, a mediodía, reza el ángelus en la plaza con quienes festejan el Año Nuevo en el Vaticano.
La última gran ceremonia del Papa es la Misa de la Epifanía, el 6 de enero. Será a las 10:00 de la mañana en la basílica de San Pedro. A partir del martes 7 de enero retoma su agenda habitual.
Melissa Butz
Traducido por Carlos Kestler