Pocos saben que en el Aula Pablo VI hay otro belén que el Papa inauguró a principios de diciembre. Se trata de un pesebre realizado por voluntarios del “Gruppo Presepio Artistico Parè di Conegliano”.
El pesebre está lleno de referencias a Véneto, región del norte de Italia. Las figuras son estatuas de 120 centímetros de altura, talladas totalmente a mano. Además, el sistema de iluminación tiene un bajo impacto ambiental gracias a los leds, ajustables a la intensidad de la luz.
FRANCISCO
“Es un signo sencillo y maravilloso de nuestra fe y no debemos perderlo. De hecho, es hermoso que se transmita de padres a hijos y de abuelos a nietos. Es una manera genuina de comunicar el Evangelio, en un mundo que a veces parece tener miedo de recordar lo que es la Navidad”.
Francisco está insistiendo mucho en la importancia de la centralidad del pesebre en las fiestas navideñas. El 1 de diciembre firmó la Carta Apostólica “Admirabile Signum” en el santuario mariano de Greccio. El documento habla sobre el significado de la tradición del pesebre.
Carlos Colomer
