Hace más de 3 décadas, el sacerdote Greg Boyle encontró un modo de ayudar a jóvenes pandilleros de Los Ángeles, California, a ver más allá y salir salir de la delincuencia. Hoy “Homeboy Industries” es toda una empresa que se mueve con ese ideal.
La compañía se dedica a dar asesoría jurídica, psicológica e incluso tienen un proyecto para remover tatuajes. Pero sobre todo, ofrecen empleo en su fabrica de ropa, en la industria mecánica o en su pastelería. Su misión es educar para el trabajo y sembrar valores.
P. GREG BOYLE
Fundador de “Homeboy Industries”
“Todos trabajan al lado con sus enemigos, Todos. Por ejemplo, tiene que trabajar, en una panadería que tenemos nosotros, con personas con las que antes estaban peleándose, con un odio muy profundo y palpable. Pero poco a poquito, no más, por medio de hacer pan tienen una experiencia de transformación”.
El proyecto ha dado muy buenos resultados. Es una herramienta para reducir la reincidencia en delitos. Solo el 1% de los jóvenes que han participado ha vuelto a cometer actos vandálicos.
P. GREG BOYLE
Fundador de “Homeboy Industries”
“Debido a su record, a su historia de violencia y todo. Tenemos un centro de rehabilitación para ayudarlos: quitar tatuajes, educarlos, pero sobre todo tener una comunidad de ternura que los acepta para que puedan transformar su dolor y sufrimiento en un futuro mejor”.
Un futuro mejor que es posible gracias a la visión de este jesuita al que hoy los pandilleros ven como a un verdadero padre.
Actualmente “Homeboy Industries” cuenta con 47 tutores, 44 psicólogos, 10 asistentes legales y 32 expertos en eliminación de tatuajes. Todos trabajan voluntariamente para llevar esperanza a jóvenes pandilleros de Los Ángeles.
Daniel Díaz Vizzi