Francisco ha culminado su viaje número 32 del pontificado. Con Japón son 49 países los visitados por el pontífice.
Allí el Papa visitó Nagasaki e Hiroshimma y conoció a algunos de los supervivientes de las bombas atómicas. Rezó además en el memorial dedicado a San Pablo Miki y los mártires asesinados en el país durante la persecución religiosa.
Francisco también consoló a las víctimas del triple gran desastre del 2011, personas que lo perdieron todo tras el terremoto, el tsunami y la catástrofe nuclear de Fukushima.
Y se reunió con las autoridades del país empezando por la de mayor rango, el emperador Naruhito, con quien departió durante 20 minutos.
De joven, Francisco quiso ser misionero en Japón. Aunque con algunos años de retraso, la espera ha merecido la pena y ahora acaba de visitar el país del Sol Naciente como Papa.
Javier Romero