Antes de concluir la misa que el Papa presidió en el Estadio Nacional de Bangkok a la que asistieron unas 60.000 personas, unas 800 bailarinas dedicaron a Francisco unos hermosos bailes tradicionales tailandeses.
Este tipo de delicadas danzas se bailan en momentos especiales como las celebraciones religiosas. Hubo cinco danzas con elementos como sombrillas, un dragón, grandes platos dorados o sombreros también dorados. La última danza incluyó a las 800 bailarinas.