De los 13 nuevos cardenales, cuatro destacan por sus buenas relaciones con el Islam.
Se trata de los arzobispos de Jakarta en Indonesia, y de Rabat en Marruecos; del actual encargado papal para el Diálogo interreligioso, Miguel Ángel Ayuso; y del británico Michael Fitzgerald, uno de los mayores expertos en el mundo musulmán.
CARD. MICHAEL FITZGERALD
“Creo que significa que esta dimensión de la Iglesia, ese salir al encuentro, es muy importante...”
Asegura que su misión no es solo construir puentes hacia otras culturas y religiones, sino también cuidar los puentes que ya existen.
CARD. MICHAEL FITZGERALD
“Siempre hemos estado construyendo puentes... Ahora hay que mantenerlos para que su estructura sea más fuerte. Creo que siempre hay que empezar de nuevo. Nunca podemos decir que las cosas ya se han hecho y no hay que hacer más. Hay que seguir trabajando, porque las personas cambian, unos se van y otros vienen. Así que de alguna forma, siempre hay que empezar de nuevo”.
Michael Fitzgeral es inglés. Soñaba con ser misionero en un país de mayoría musulmana, pero la vida le llevó por otros caminos.
CARD. MICHAEL FITZGERALD
“Me ofrecí para trabajar con musulmanes... Dije que me gustaría ir a Nigeria, un país de África con muchos cristianos y musulmanes. Como segunda opción puse Túnez. Pero me enviaron a Roma para estudiar Teología, y luego entré en el Pontificio Instituto de Estudios Árabes”.
Ha presidido el Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso. Después de años en el Vaticano, Benedicto XVI le nombró nuncio en Egipto y representante ante la Liga Árabe.
Cuando se jubiló, empezó a trabajar en una parroquia en Liverpool, en su patria natal, y con universidades de Estados Unidos y Gran Bretaña.
Ahora como cardenal, su voz se escuchará más fuerte en todo el mundo.
