En África los Papas han impulsado la fe de una Iglesia joven y sembrado esperanza.
Pablo VI fue el primer pontífice moderno que visitó el continente. Fue en 1969, cuando viajó a Uganda. Por eso nunca se olvidará el mensaje que dejó. Dijo que había llegado el momento de que los propios africanos tomaran el testigo dejado por los misioneros para evangelizar el continente.
La huella que años más tarde dejó Juan Pablo II también fue imborrable. Visitó África 16 veces. No se olvidarán encuentros como este con Nelson Mandela en 1995.
O sus encuentros con enfermos. África vibró literalmente de alegría al ver a un pontífice tan cercano.
Benedicto XVI habló con fuerza en sus dos visitas al continente. Denunció lo que más tarde Francisco llamó la “colonización ideológica” en África. Pero sobre todo envió un mensaje de ánimo:
BENEDICTO XVI
“Esperando contra toda esperanza”. ¿No es una magnífica definición del cristiano? África está llamada a la esperanza a través de vosotros y en vosotros.
El viaje que Francisco realizará en septiembre será el cuarto de su pontificado a este continente.
En 2015 visitó Uganda, Kenia y República Centroafricana. El viaje a este último país fue desaconsejado por motivos de seguridad. Sin embargo Francisco insistió. Nadie olvidará su paso por un campo de refugiados.
FRANCISCO
Tenemos que trabajar y rezar y hacer de todo por la paz. Pero la paz sin amor, sin amistad, sin tolerancia, sin perdón, no es posible.
En República Centroafricana el Papa realizó un gesto único. Inauguró el Jubileo de la Misericordia que más tarde iniciaría en toda la Iglesia. Quiso hacerlo desde uno de los países más castigados por la guerra.
Francisco visitó Egipto en 2017 y en 2019 Marruecos. Fueron dos viajes donde continuó el trabajo de sus predecesores para mejorar las relaciones con el Islam.