El Papa Francisco concluyó en la ciudad de Blaj su viaje a Rumanía. Después se trasladó a Sibiu para viajar desde allí a Roma.
La ceremonia de despedida fue sencilla. Decenas de personas le saludaron en el aeropuerto donde Francisco estuvo acompañado por el presdiente rumano y su esposa, con los que mantuvo un breve encuentro en privado.
Concluye el viaje número 30 del pontificado de Francisco. El Papa en estos tres días se reunió con representantes ortodoxos, la pequeña comunidad católica y celebró la beatificación de 7 mártires del comunismo. Además dirigió una petición de perdón a la comunidad gitana.