Así ha comenzado la cumbre del Vaticano contra los abusos, con una oración al Espíritu Santo para que ayude a los participantes a encontrar soluciones.
Luego, el superior de una Orden Religiosa ha recitado una oración pidiéndolo explícitamente.
“Muchos se han callado y no han podido pedir ayuda, otros han hablado, pero nadie les ha creído o han sido llamados mentirosos y silenciados”.
“Que reconozcamos las heridas del pueblo y mostremos cómo debemos actuar para que no se suprima la verdad y se haga justicia a los heridos”.
Luego, el Papa ha abierto el encuentro con un breve pero intenso discurso.
FRANCISCO
“El santo pueblo de Dios nos mira y se espera de nosotros no simples y descontadas condenas, sino medidas concretas y eficaces. Tenemos que ser concretos”.
A puerta cerrada los 190 participantes, la mayoría obispos presidentes de conferencias episcopales, han visto el vídeo testimonio de cinco víctimas.
Dedicarán todo el día de hoy a reflexionar sobre la responsabilidad del obispo ante estas situaciones.