El borrador de la nueva Constitución apostólica sobre la organización de la Curia está siendo estudiado a fondo desde punto de vista canónico y de estilo. Probablemente será sometido a una nueva revisión.
Así lo explicó el secretario del Consejo de cardenales, Marcello Semeraro, durante la lección magistral que impartió en la Pontificia Universidad Lateranense de Roma.
MONS. MARCELLO SEMERARO
Secretario, Consejo de Cardenales
“Es previsible que después haber entregado el texto se proceda a una nuevo giro de consultas sobre lo que propone el Consejo de cardenales. Lo mismo sucedió con la Constitución Apostólica Pastor Bonus”.
La nueva constitución tiene un nombre provisional: 'Predicad el Evangelio': Es una actualización importante de la norma que regula el funcionamiento de la Curia y algunos aspectos del gobierno de la Iglesia. La versión anterior es la “Pastor Bonus”, de Juan Pablo II, de hace 30 años.
Marcello Semeraro dijo que esta nueva constitución trata de adecuarse el espíritu misionero que Francisco propuso desde el inicio de su pontificado: una Iglesia-hospital de campo que recoja a los heridos provocados por una época agitada.
FRANCISCO
28 de julio, 2013
“Este cambio de época, lo comentaba ayer con los obispos brasileños, está lleno de heridos: gente que dejó la Iglesia por la mitad, que se fue, que volvió... Y uno puede pensar: 'Bueno, vamos a hacer un curso, que esto, que aquello...' Después de una batalla, lo primero que hay que hacer en un hospital de campaña es curar las heridas”.
La constitución tratará de reflejar varios aspectos clave del Concilio Vaticano II: evitar una excesivo centralismo o redescubrir el papel de los laicos. Recordó que no fue casual el nombramiento de un laico como prefecto de la Secretaría para la Comunicación
MONS. MARCELLO SEMERARO
Secretario, Consejo de Cardenales
“Es una decisión no improvisada. Es más, ha sido pensada gracias a la ayuda de personas competentes en materias jurídicas y teológicas”.
La próxima reunión del Consejo de Cardenales será los días 10, 11 y 12 de diciembre. Sobre la mesa, además de la revisión de la constitución, está la renovación de algunos de sus miembros que ya pasan de los 75 años.