Ante la próxima conferencia mundial de Naciones Unidas sobre el clima, representantes de la Iglesia católica de cada continente ha firmado esta declaración. Piden a la comunidad internacional medidas urgentes para frenar el calentamiento global.
La declaración ha sido promovida por Caritas Internationalis, The Global Catholic Climate Movement, y la CIDSE, una agrupación de organismos de ayuda católicos.
MONS. JEAN-CLAUDE HOLLERICH
Arzobispo de Luxemburgo
“Sabe usted cómo funcionan los políticos ¿no? Hacen cosas si son elegidos. Nosotros tenemos que enseñarles que los electores son muy sensibles a las cuestiones relacionadas con la ecología porque estos son los problemas reales y urgentes y debemos marcarles la agenda”.
MARTINA LIEBSH
Caritas Internationalis
“Creo que todavía se necesita reforzar el mensaje. Tenemos la Laudato Si’ que es nuestra inspiración pero creo que todavía faltan pasos para que verdaderamente llegue a la conciencia de los fieles”.
La conferencia mundial será en diciembre en Polonia. Se pretende limitar el aumento de la temperatura global a no más de un 1.5ºC y para ello es necesario un cambio estructural financiero. Donald Trump retiró la firma de EE.UU. del acuerdo de París, pero empresas e instituciones lo están aplicando por su cuenta.
Según el Índice Global de Riesgo Climático de 2017 elaborado por Germanwatch, las consecuencias serán desastrosas en algunos rincones del planeta.
El sureste de África y el Caribe serán regiones especialmente castigadas por los cambios medioambientales. En India las olas de calor en 2015 se cobraron la vida de más de 2.000 personas. Aseguran que las altas temperaturas han arruinado las cosechas, lo que ha llevado a la desesperación y suicidio de más de 60.000 campesinos en los últimos 30 años.