Del viaje del Papa a Irlanda habrá que prestar atención a tres cosas:
ABUSOS
Tras un devastador informe sobre abusos sexuales en Estados Unidos el Papa escribió una carta dirigida a todos los católicos. En ella pidió oración y penitencia y colaborar para prevenir que vuelvan a suceder en el futuro.
De este modo sitúa este problema como una de las prioridades para cada católico y precisamente Francisco viaja a Irlanda, uno de los países más afectados por los abusos y la mala gestión de la jerarquía. Allí el Papa se reunirá con víctimas y habrá que estar atento por si, desde ese singular escenario, envía algún que otro mensaje a la Iglesia y al mundo.
FAMILIA
El Encuentro Mundial de las Familias ofrecerá una oportunidad única para reflexionar sobre uno de los documentos más importantes del pontificado de Francisco: la Amoris Laetitia. La vigilia del sábado será el momento culminante y el domingo el Papa anunciará la sede del próximo Encuentro Mundial.
SANTIDAD COMÚN
Durante el viaje Francisco hará una peculiar parada para rezar ante las reliquias de un exalcohólico. Se trata de Matt Talbot, un humilde trabajador de un depósito maderero que consiguió superar una arraigadísima adicción a la bebida. Tras su conversión poco antes de los treinta años su actitud ante la vida cambió y se convirtió en uno de los “santos de la puerta de al lado” que Francisco describió en su último documento papal.