(SOLO VIDEO: IMÁGENES DE ARCHIVO)
Los obispos de Chile presentaron el pasado 3 de agosto las conclusiones de la 116ª asamblea plenaria extraordinaria. En ellas presentan una lista de directrices para abordar la crisis que atraviesa la Iglesia en el país tras la gestión de los casos de abusos sexuales.
Entre las medidas se anuncia que se reforzará la comunicación con la justicia civil y que se crearán departamentos para mejorar la atención a denunciantes y víctimas. También publicarán en la web de la Conferencia Episcopal los nombres de clérigos con sentencias definitivas, tanto civiles como canónicas, por abuso de menores de edad.
A pesar de que las víctimas de abusos han acogido las medidas anunciadas con escepticismo, el Papa escribió una carta manuscrita a los obispos. En ella dice que las conclusiones son “realistas y concretas” y que aplaude el “esfuerzo comunitario y pastoral”.
La gestión de los abusos sexuales en Chile parece haber pasado factura a la popularidad de la Iglesia en el país. Encuestas locales como la hecha por Cadem señala que el 83% de la población considera que la Iglesia no es honesta y el 96% que protege a los sacerdotes acusados de abusos.
