El Papa Francisco explicó cuál es el auténtico sentido de la fe. Dijo que no consiste en contentar a Dios con obras, sino en creer en quien Él ha enviado, Cristo. Por eso, advirtió de una tentación común entre los creyentes.
FRANCISCO
“Es una tentación habitual esta de reducir la religión a la práctica de las leyes, proyectando en nuestra relación con Dios la imagen de la relación entre el siervo y su amo”.
Ante los 20.000 fieles que soportaron los rigores del calor romano, el Papa aseguró que, aunque en tiempos de Jesús muchos le seguían porque satisfacía sus necesidades inmediatas, Cristo vino para traer algo más.
FRANCISCO
“Jesús ha venido a traernos algo más, a abrir nuestra existencia a un horizonte más amplio respecto a las preocupaciones cotidianas del alimentarse, del vestirse, de la carrera o similares”.
Por eso, Francisco insistió en que Cristo no desea solo que la gente lo busque, sino que lo conozca, que tengan una relación de amor y de confianza con Dios para así poder llevar a cabo sus obras.
FRANCISCO
“Él es el verdadero pan de vida, quiere saciar, no solo los cuerpos, sino también las almas dando el alimento espiritual que puede satisfacer el hambre más profunda”.
Antes de despedirse, el Papa quiso recordar que el 6 de agosto se cumplen 40 años de la muerte de Pablo VI que será canonizado en octubre. Como gesto de reconocimiento y de cariño pidió este aplauso para el Papa Montini al que se unieron todos los peregrinos en San Pedro.