Después de esta comprobación, Francisco comenzó de nuevo con su catequesis previa al rezo del Ángelus.
Ante las dramáticas noticias que llegan desde el Mediterráneo, donde decenas de personas han fallecido ahogadas estas semanas mientras escapaban de la guerra y la violencia e intentaban alcanzar las costas de Europa en busca de una vida mejor, el Papa hizo este llamamiento a la Comunidad Internacional para que evite más muertes.
FRANCISCO
“Dirijo un llamamiento urgente para que la Comunidad Internacional actúe con decisión y rapidez con el fin de evitar que se repitan las tragedias de este tipo y para garantizar la seguridad y el respeto de los derechos y de la dignidad de todos”.
También expresó su dolor por estos naufragios y aseguró que reza por los muertos, por los desaparecidos y por sus familias.
Anteriormente, Francisco habló sobre la compasión de Cristo. Explicó que Jesús no mira a los seres humanos desde la distancia sino todo lo contrario.
FRANCISCO
“La mirada de Jesús no es una mirada neutra, o peor, fría y distante, porque Jesús mira siempre con los ojos del corazón. Su corazón es tan tierno y lleno de compasión que sabe acoger también las necesidades más escondidas de las personas”.
Ante los 25.000 peregrinos que asistieron al rezo del Ángelus, el Papa dijo que los tres verbos del pastor son “ver”, “compadecerse” y “enseñar”, tal y como Jesús actuaba con las multitudes que lo seguían. Por eso, Cristo siempre enseña con compasión qué es la verdad.
FRANCISCO
“Todos tenemos necesidad de la palabra de verdad que nos guíe e ilumine el camino. Sin la verdad, que es Cristo mismo, no es posible encontrar la dirección correcta de la vida”.
Por último, Francisco recordó que al alejarse de Cristo la existencia se transforma en desilusión e insatisfacción mientras que, de su lado, se crece en el amor.