En un gesto de ecumenismo operativo, el Papa y otros líderes cristianos llegaron al encuentro de diálogo en la misma furgoneta. Nada más entrar en el Centro, el Papa saludó a estos cristianos de las dos Coreas.
Le saludó el secretario general del Consejo Mundial de Iglesias, que destacó el buen momento del diálogo entre cristianos, y dijo que se debe en gran parte al esfuerzo del Papa Francisco.
OLAF FYKSE TVIET
Secretario General, Consejo Mundial de Iglesias
“Usted ha demostrado de muchos modos con su ministerio, su compromiso con este santo ministerio de la unidad, sirviendo a la justicia y a la paz, saliendo de la zona de confort de la Iglesia. Su liderazgo es una fuerte señal de cómo expresar esta unidad de servicio y de misión, 'caminando, rezando y trabajando juntos'”.
La número 2 del Consejo Mundial de Iglesias le explicó que iban vestidas de negro como gesto de solidaridad con las mujeres explotadas en todo el mundo.
AGNES ABUOM
Moderador del Consejo Mundial de Iglesias
“No porque ignoremos y faltemos el respeto al color negro, sino porque uno de los grandes dramas de nuestro mundo es la violación y la violencia contra mujeres. Estamos diciendo, '¡No! ¡Ya basta!'”
El Papa mencionó el simbolismo de los 70 años del Consejo Mundial de Iglesias. Recordó un versículo del Evangelio en el que Jesús dice que se debe perdonar hasta “setenta veces siete”.
FRANCISCO
“El número no se refiere a una cantidad, sino que abre un horizonte cualitativo: no mide la justicia, sino que inaugura el criterio de una caridad sin medida, capaz de perdonar sin límites. Esta caridad que, después de siglos de controversias, nos permite estar juntos, como hermanos y hermanas reconciliados y agradecidos con Dios nuestro Padre”.
El Papa también pidió a las Iglesias que el diálogo no les lleve a perder de vista sus orígenes ni su misión, ni por exceso, ni por defecto.
FRANCISCO
“No seríamos fieles a la misión que se nos ha confiado si redujéramos este tesoro al valor de un humanismo puramente inmanente, adaptable a las modas del momento. Y seríamos malos custodios si quisiéramos solo preservarlo, enterrándolo por miedo a los desafíos del mundo”.
El Papa recordó que se han dado grandes pasos hacia la unidad, y que en muchos ámbitos los cristianos colaboran para ayudar a las personas. Por eso, comparten también el drama de la persecución.
FRANCISCO
“Miremos también a tantos hermanos y hermanas nuestros que en diversas partes del mundo, especialmente en Oriente Medio, sufren por ser cristianos. Acompañémoslos. Y recordemos que nuestro camino ecuménico está precedido y acompañado por un ecumenismo ya realizado, el ecumenismo de la sangre, que nos exhorta a seguir adelante”.
Para concluir la ceremonia, todos los participantes cantaron el “Padre Nuestro” en francés.
Antes de abandonar el centro, el Papa se detuvo con representantes de la Federación de Iglesias Protestantes Suizas, que le saludaron en nombre de sus confesiones. Y con ese saludo concluyó su visita al Consejo Mundial de Iglesias.