Francisco dijo que estaba muy contento por estar ante la policía italiana. Centenares de ellos se desplazaron hasta el Aula Pablo VI para tener un afectuoso encuentro con él.
Minutos antes de la llegada del Papa, entre piezas de música de la banda de la policía, se contaron algunas experiencias, muchas de ellas tristes como la de la mujer de Mariano Romiti, asesinado a punta de pistola por terroristas en 1979.
“Era amable. Tanto es así que después de haber fallecido vinieron dos señores a mi casa a darme el pésame. Me dijeron: “Su marido nos arrestó, pero nos daba buenos consejos. Que no lo hiciéramos más, que estábamos arruinando nuestra vida””.
Lo que levantó un gran aplauso fue el recuerdo de una compañera que perdió a sus padres, a su marido, también policía, y a sus 2 hijos en los terremotos de agosto de 2016.
“Y esa mujer, a pesar de sufrir a mi parecer el más injusto de los castigos... Porque perder a los padres es algo extremadamente triste, grave, pero forma parte del ciclo de la vida. Perder al marido, policía... pero creo que la maldición más grande es la de enterrar a los propios hijos así que... tenemos el orgullo de que esa extraordinaria mujer sea nuestra compañera”.
Con esto el jefe de la policía recordó también que debajo del uniforme de policía hay seres humanos y precisamente de eso habló el Papa. Dijo que la familia es el lugar donde se aprende qué es el amor, el lugar donde uno busca refugio y donde se reponen fuerzas para afrontar las dificultades de la vida.
FRANCISCO
“La familia es el lugar de la ternura. Por favor, no perder nunca la ternura. En esta época falta ternura. Es necesario encontrarla y la familia nos puede ayudar a eso”.
También dijo que a través de la ternura de la familia se puede llegar a Dios, que da la fuerza para afrontar las dificultades de la vida.
FRANCISCO
'A partir de esta experiencia interior fundamental es posible resistir todas las contrariedades y las vicisitudes de la vida, las agresiones del mundo, las infidelidades y los defectos nuestros y de los demás”.
Al terminar su discurso la banda tocó una pieza muy especial: “la preghiera del poliziotto”, la oración del policía, con la que se puso punto final a este entrañable encuentro.
