Será el próximo 19 de mayo cuando se conozca la fecha de ceremonia y el lugar donde el beato Óscar Romero será proclamado santo. Los obispos de El Salvador han hecho solo una petición al Papa.
CARD. GREGORIO ROSA CHÁVEZ
Obispo Auxiliar de San Salvador
“Hay una carta al Papa de los obispos del Salvador, se entregó personalmente al Santo Padre con dos propuestas. Primera petición: “Santo Padre que sea en nuestro país, que lo podamos ver en directo y todos, multitudinariamente. Si no es posible, pase usted por el Salvador cuando pasé por Panamá”. El contenido de la carta ya se hizo público, por eso lo puedo decir, y esta idea ha gustado mucho en el Vaticano, que el Papa haga una pausa en su ruta. Son dos horas de El Salvador a Panamá, si es que la ceremonia de canonización no es allá sino aquí en Roma. Veremos qué pasa”.
El cardenal Gregorio Rosa Chávez es una de las personas que mejor conoció al futuro san Óscar Romero. Juntos vivieron momentos muy difíciles, como cuando fue acusado de ser próximo a la Teología de la liberación.
CARD. GREGORIO ROSA CHÁVEZ
Obispo Auxiliar de San Salvador
“Hay un momento tremendo cuando a Roma llegan acusaciones muy fuertes contra él y él tiene que defenderse y trabajamos juntos toda la noche en el documento para defenderse de las acusaciones. Ese fue un momento dramático porque era doloroso ver lo que se decía de él y decíamos, “si eso no es cierto”. Fue para mí uno de los momentos más dramáticos en cuanto a su relación con Roma. Hubo después otras acusaciones parecidas pero esa primera vez me marcó mucho”.
Óscar Romero enfadó al ejército y a las oligarquías con su denuncia constante de la desigualdad y tampoco contentó a las guerrillas por su lucha contra la violencia. Por eso, sabía que habría represalias.
CARD. GREGORIO ROSA CHÁVEZ
Obispo Auxiliar de San Salvador
“Él sabía que lo iban a matar, todos lo sabíamos. La pregunta era cómo y dónde. Temíamos que fuera un atentado, que lo atraparan en su casa, que fingieran un accidente de tráfico. Temíamos eso. Y Dios le dio la gracia de morir en el altar a la hora del ofertorio”. “No es fácil imitar a Romero. Es un discípulo que se arriesgó, que fue a contracorriente, que fue incomprendido pero nunca dejó de ser discípulo. Con una mística de víctima, de ofrenda”.
El Salvador ha cambiado mucho desde aquellos tiempos pero sigue sufriendo con el azote de las maras, bandas de violentos pandilleros. El cardenal asegura que el futuro San Óscar Romero podría ayudar mucho a resolver esta situación.
CARD. GREGORIO ROSA CHÁVEZ
Obispo Auxiliar de San Salvador
“La violencia de los jóvenes pandilleros. Mueren cada día asesinados entre 10 y 12 personas en un país de 6 millones de habitantes. Es de las tasas más altas del mundo. La gente está como descorazonada, no ve salida. El Papa pone la fórmula. Romero puede llevar la paz al país con 3 condiciones. Primero que se conozca lo que él predicó, que se imite su ejemplo y tercero que se le invoque como intercesor”.
San Romero de América está a punto de convertirse en San Romero del mundo. Como cuenta el cardenal, un nuevo santo que podría ser intercesor de aquellos que sufren injusticia, de los migrantes o incluso de los periodistas dado que fue un comunicador excepcional.
