El Papa se ha reunido con casi 700 religiosos y religiosas que reflexionan en Roma sobre la identidad y los desafíos de la vida religiosa.
CARD. JOÃO BRAZ DE AVIZ
Prefecto, Congregación para la Vida Consagrada
'Pero hoy se habla de consagración también para personas casadas, dentro de las nuevas formas eclesiales”.
El Papa respondió improvisando un discurso sobre qué elementos deben mantenerse fuertes en la vida consagrada.
FRANCISCO
“He recordado lo que dije durante un viaje a Puglia: las tres “p”. Son las columnas que permanecen y que seguirán permaneciendo en la vida consagrada: la plegaria, la pobreza y la paciencia”.
Según el Papa, la “plegaria” les hace regresar a Dios que es quien los ha llamado a esa vida; y les recuerda que trabajan por Dios y no por sus propios intereses ni para instituciones.
La “pobreza” es como un muro de contención que les protege de la vanidad y el orgullo.
Y la “paciencia” consiste en afrontar “las pequeñas cosas de la vida comunitaria, hasta el sacrificio de sí mismos” y “llevar sobre las espaldas los problemas y sufrimientos del mundo”.
