El Papa se ha reunido con la Congregación para la Doctrina de la Fe, el departamento que durante años presidió el cardenal Joseph Ratzinger.
Se encarga de proponer la doctrina católica y de tutelarla para evitar desviaciones.
FRANCISCO
“Aprecio vuestro delicado servicio, que responde al particular vínculo de vuestro dicasterio con el ministerio del sucesor de Pedro, el cual está llamado a confirmar a los hermanos en la fe y en la Iglesia en la unidad”.
Junto al Papa repasaron algunas cuestiones de las que se están ocupando. Por ejemplo, las implicaciones éticas de la antropología cristiana en ámbito económico-financiero; o la eutanasia.
El Papa dijo que por desgracia es normal que se proponga la eutanasia “cuando la vida no se valora por su dignidad sino por su eficacia y productividad”. Por eso, recordó que “la vida humana, desde la concepción hasta la muerte natural, posee una dignidad intangible”.
La Congregación para la Doctrina de la Fe es uno de los departamentos más prestigiosos del Vaticano. En el pasado fue conocida como la Inquisición.
La anécdota del encuentro fue este pequeño tropezón del Papa que por fortuna quedó sólo en un susto.