El Papa comenzó el mes de junio con este encuentro en el Circo Massimo de Roma con 50 mil peregrinos de 122 países. Son del movimiento “Renovación Carismática” que cumple 50 años.
FRANCISCO
“Podría ocurrir que vuestro modo de rezar no guste a alguno, pero es cierto que es plenamente coherente con la tradición bíblica. En los salmos, por ejemplo, David baila ante el Arca de la Alianza lleno de alegría”.
El Papa les pidió que trabajen por la paz en el mundo, en primer lugar aceptando las diferencias con las personas que los rodean. Y consiguieron algo que pocos logran: que el Papa cantase.
En junio, llegaron en tren al Vaticano cientos de niños de zonas afectadas por terremotos en Italia.
El Papa se sentó con ellos para conocer sus historias.
“Fueron días difíciles”.
“Claro... Cuéntame. ¿Por qué fueron difíciles? Dime, dime”.
“Tuvimos muchos problemas porque las casas y los edificios se derrumbaron. Y también nuestras escuelas”.
“Esto que habéis vivido es algo muy feo, es una calamidad. ¿Verdad? Es una calamidad. Y las tragedias hieren el alma. Pero el Señor nos ayuda a recuperarnos. ¿Tenéis confianza en el Señor?”
“¡Sí!”
A principios de mes le visitaron seis obispos de Venezuela, para explicarle de primera mano la dura situación del país.
“Esto es también un dossier donde presentamos, -bueno, hasta el día en que nos vinimos, ya van más-, de los últimos fallecidos en las protestas de Venezuela en los últimos días”.
MONS. DIEGO PADRÓN Presidente, Conferencia Episcopal Venezuela
“Tenemos, como Conferencia Episcopal, todo su apoyo y todo el apoyo de la Santa Sede y que el pueblo venezolano tiene toda su cercanía y también todo su apoyo”.A finales de mes, el Papa cumplió 25 años como obispo y lo celebró con esta misa con los cardenales que había en Roma.
FRANCISCO
“Y a nosotros hoy el Señor nos dice lo mismo: ¡Levántate! ¡Mira! ¡Ten esperanza! Nos dice que no es el momento de poner nuestra vida en fase de cierre, de no cerrar nuestra historia, no recapitular nuestra historia”.
Precisamente, a finales de mes el Papa nombró otros cinco nuevos cardenales.
Entre ellos estaban Gregorio Rosa Chávez, de El Salvador, y colaborador del mártir monseñor Romero; el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella; o el primer sacerdote católico sueco en muchas décadas, Anders Arborelius.
FRANCISCO
“Dios no os llama a convertiros en “príncipes” de la Iglesia, a “sentaros a su derecha o a su izquierda”. Os llama a servir como Él y con Él”.
Después de la ceremonia, los nuevos purpurados fueron a visitar a Benedicto XVI, que les bendijo muy sonriente.