Cuando Karol Wojtyla era arzobispo de Cracovia, había otro cardenal héroe de la resistencia contra el totalitarismo comunista en Polonia. Era su amigo Stefan Wyszynski, arzobispo de Varsovia.
Ahora el Papa Francisco ha reconocido oficialmente que también vivió heroicamente las virtudes cristianas.
Se trata del primer paso importante del proceso de canonización.
El cardenal Stefan Wyszynski participó en los dos cónclaves de 1978 y fue decisivo en la elección de Juan Pablo II.
Para proceder a la beatificación, se deberán presentar las pruebas de un milagro de Dios realizado por su intercesión, como por ejemplo una curación milagrosa.