El mensaje del Papa para la próxima Jornada Mundial de la Paz es contundente: recuerda que hay 250 millones de migrantes en el mundo, 22 millones de ellos refugiados, y pide a la comunidad internacional acciones concretas para acogerlos.
CARD. PETER TURKSON
Prefecto, Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral
“Un techo sobre sus cabezas, un trabajo y una tierra donde vivir. Si el desarrollo garantiza estos tres elementos, si los hace accesibles y disponibles para todos, promoveremos de verdad el desarrollo”.
En el Vaticano se presentó el contenido de este mensaje para la Jornada por la paz que se celebra cada uno de enero.
Francisco arremete contra los políticos que fomentan el temor hacia los emigrantes. Estas personas “siembran violencia, discriminación racial y xenofobia”. La solución para terminar con los miedos es reducir las desigualdades.
MONS. SILVANO TOMASI
Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral
“Que el 1% de las personas más ricas del mundo posean más del 50% de la riqueza mundial no es razonable. La paz florece cuando hay menos desigualdad e injusticia. Y cuando hay menos desigualdad e injusticia también hay menos migraciones y la gente puede defender su primer derecho, el de no emigrar”.
El Papa propone un cambio en la forma de mirar a los migrantes y refugiados e invita a recordar cuántos pueblos a lo largo de la Historia han hecho lo mismo.
También expresa su apoyo a la ONU por los dos pactos globales que tiene pensado cerrar en 2018. Dos marcos legales para proteger a los refugiados y a los migrantes.
El Vaticano, de hecho, envió 20 interesantes propuestas basadas en las experiencias recogidas de las Conferencias Episcopales donde se sufren las peores crisis de migrantes y refugiados.
La Jornada Mundial de la Paz se viene celebrando en la Iglesia cada uno de enero desde 1968, por indicación de Pablo VI.