Francisco mantuvo un encuentro con el reverendo Derek Browning, el Moderador de la Iglesia de Escocia quien saludó con estas palabras al Papa.
“Gente sabia nos ha dicho que tenemos que hablar de verdad y de amor pero que, en primer lugar, tenemos que hablar juntos”.
El Papa agradeció esta visita del máximo representante de la Iglesia Escocesa que se produce pocos meses después la celebración del quinto centenario de la Reforma. Francisco subrayó la superación de los recelos entre católicos y protestantes.
FRANCISCO
“Demos gracias al Señor por el gran regalo de haber vivido juntos este año como auténticos hermanos, nunca más como rivales, tras muchos siglos de extrañeza y conflicto”.
El Papa recordó que esa sospecha mutua pertenece al pasado gracias al camino de la comunión que cada vez está dando más frutos.
FRANCISCO
“La purificación mutua de la memoria es uno de los frutos más significativos de este camino que nos une”.
En el intercambio de regalos, el Moderador entregó al Papa un libro, sobre uno de los santos más populares del país, y otro original regalo.
“Comida y bebida de Escocia que esperamos que le mantengan sano y fuerte”.
El Papa le correspondió con los tres escritos fundamentales de su pontificado. La Iglesia de Escocia, conocida como la Kirk, rompió en el año 1560 con Roma y actualmente tiene menos de medio millón de seguidores.