Casi 10 años después de haber celebrado la Jornada Mundial de la Juventud, Australia reunirá a miles de jóvenes de nuevo en el Festival de Jóvenes Católicos del 7 al 9 de diciembre.
ANTHONY FISHER
Arzobispo de Sydney (Australia)
“La Jornada Mundial de la Juventud tuvo un gran impacto en Australia. Provocó un gran aumento de calidad y cantidad de los jóvenes en parroquias. Mucha gente joven entró en nuestros seminarios, se casaron, y todo eso fue resultado de la JMJ. Los obispos australianos pensaron que sería bueno celebrar un Festival para Jóvenes Católicos entre medias de cada Jornada Mundial de la Juventud”.
El festival llega en un momento vital para la religión en Australia. Además de los últimos ataques contra la libertad religiosa, el país está esperando los resultados de la votación por los matrimonios del mismo sexo. Al mismo tiempo, el Parlamento está estudiando legalizar la eutanasia.
ANTHONY FISHER
Arzobispo de Sydney (Australia)
“Hay muchas preguntas importantes para los jóvenes australianos en este momento. Por ejemplo: “¿Qué tipo de país quieren para ellos? ¿Uno en el que la fe, la vida y el amor son respetados y celebrados o uno en el que serán amenazados en todos los modos posibles por las fuerzas en la cultura con cambios en las leyes y las políticas?”.
Los obispos esperan que más de 15 mil jóvenes, ponentes y cantantes católicos, como Matt Maher, asistan al festival. Los participantes reflexionarán sobre las cuestiones del próximo Sínodo de los Obispos en 2018, “Los jóvenes, la fe y el Discernimiento Vocacional”.
El Arzobispo Fisher espera que este festival anime a los jóvenes católicos a reavivar su fe. Justo como ocurrió hace 10 años, con la visita del Papa Benedicto XVI.