La segunda etapa del viaje en Colombia del Papa comenzó con esta misa en Villavicencio en la que fueron beatificados dos mártires colombianos.
El Papa llegó un poco más tarde del horario previsto al aeropuerto de Villavicencio. A pie de pista fue recibido con gran cariño por una comitiva en la que los niños fueron los protagonistas.
Este retraso no impidió que Francisco recorriera las calles de la ciudad como estaba previsto aunque no sin dificultad. Después el Papa quiso recorrer los últimos metros en papamóvil ya en el terreno CATAMA.
Allí le esperaban cerca de un millón de personas. A pesar de que había llovido mucho, nada consiguió que los peregrinos se movieran de su sitio. Asistieron muchos indígenas de poblaciones cercanas y también víctimas de la violencia, puesto que en esta zona se ha sufrido especialmente por esa lacra.
Con estas palabras, subieron a los altares monseñor Jesús Jaramillo, el obispo de Arauca asesinado por el ELN, y el padre Pedro Ramírez, conocido como el mártir de armero.
“De ahora en adelante serán llamados beatos y se podrá celebrar su fiesta cada año en los lugares y el modo establecido por el derecho el 3 y el 24 de octubre respectivamente. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”.
Durante su homilía, el Papa se fijó en la figura de la Virgen María en la solemnidad de su Nacimiento. Explicó la importancia que tienen las mujeres en la Historia de la Salvación.
FRANCISCO
“En comunidades donde todavía arrastramos estilos patriarcales y machistas es bueno anunciar que el Evangelio comienza subrayando mujeres que marcaron tendencia e hicieron historia”. FLASH “En este mundo donde la violencia psicológica, verbal y física sobre la mujer es patente, José se presenta como figura de varón respetuoso, delicado que, aun no teniendo toda la información, se decide por la fama, dignidad y vida de María”.
En esta zona tan castigada durante años por la violencia de la guerrilla, Francisco recordó que una auténtica reconciliación que también debe incluir la justicia.
FRANCISCO
“Cuando las víctimas vencen la comprensible tentación de la venganza, se convierten en los protagonistas más creíbles de los procesos de construcción de la paz. Es necesario que algunos se animen a dar el primer paso en tal dirección, sin esperar que lo hagan los otros. ¡Basta una persona buena para que haya esperanza! No lo olviden: ¡Basta una persona buena para que haya esperanza!”. FLASH “El recurso a la reconciliación no puede servir para acomodarse a situaciones de injusticia”. FLASH “Todo esfuerzo de paz sin un compromiso sincero de reconciliación siempre será un fracaso”.
Pidió a los colombianos que para esa reconciliación imiten a la Virgen María con su “sí”, a San José que supo dejar de lado su orgullo, y a Cristo que abraza la Historia.